segunda-feira, 6 de outubro de 2008

os irmãos

.
"la primera generación salpica su habla con palabras inglesas relacionadas con el trabajo o la vida diaria. Los porteros, por ejemplo, en su mayoría hispanos, se expresan en un bellísimo español guatemalteco o mexicano hablándote del boiler (la caldera), el freezer (el congelador), el basement (el sótano) o del "leak que había en el ceiling" (la gotera en el techo). No es incultura, es economía de medios, ansia de hacerse entender, y en muchos casos responde al hecho de que es la primera vez que el emigrante usa esa palabra porque el aparato que nombra no existía en su país. La segunda generación, y eso está más que reflejado en la literatura, se aparta de las raíces paternas, habla un inglés impecable porque lo ha estudiado en la escuela y chapurrea un español bastante incorrecto (a veces tímido) con la familia.

Estamos hablando de un problema de estatus, de clases sociales; si el niño hispano quiere ser alguien ha de saber, no ese inglés exótico que tanta gracia nos hace, no, ha de saber inglés. (...) A las autoridades competentes habría que pedirles que rebajaran los discursos triunfalistas sobre la importancia de nuestra lengua y se pusieran a trabajar para que tuviera una presencia con la dignidad que se merece. La única manera de que el español prospere es que a los niños inmigrantes no les cause vergüenza hablar el idioma de sus padres. A eso deberían contribuir, para empezar, los medios de comunicación hispanos que, al menos en Estados Unidos, se esfuerzan en resaltar esa imagen chillona y bullanguera de nuestra lengua. La televisión española internacional es más sobria pero no se queda atrás en baratura y horterez. No lo digo yo, lo dice cualquier español que viva en el extranjero. Da vergüenza. Es en ese tipo de cosas en las que perdemos día a día una oportunidad, nunca mejor dicho, de oro. El español está vivísimo en las calles de Nueva York pero no se puede confiar su supervivencia al número de hablantes, porque el inmigrante va a lo suyo, y lo suyo es echar lastre y abandonar todo aquello que le impida prosperar y ser uno más.", daqui.



agora,
trocar español por português, nueva iorque por paris, boiler por pubéla, leak que había en el ceiling por vidar as orduras, e tá aí a razão pela qual este artigo ( http://ultimahora.publico.clix.pt/noticia.aspx?id=1332947 ) me irritou tanto aqui há uns meses.

vê-se logo que és emigrante, âhn.

2 comentários:

sergei disse...

deixa-te lá de merdas que eu sei que isto tudo foi uma escusa para meteres um link para o público e aparecer por lá o link para o este blog de volta. corisco d'emigrante!

nuno disse...

não tinha reparado, amigo com nome de leste.